Los niños tímidos suelen ser muy inseguros en sus relaciones sociales, solitarios e inhibidos ante los demás. Algunos padres tratan de ayudar a sus hijos tímidos de forma directiva y creen que así los protegen. Otros tratan de «psicologizar» todas sus reacciones y dando excesivo énfasis a todos sus fracasos sociales. Todo ello aumenta aún más su sumisión, dependencia y sentimientos de angustia e inseguridad.
* Lo que necesitan estos niños es un ambiente hogareño poco estresante
* Buenos modelos de relaciones sociales en sus padres
* No centrar en ellos toda su atención
* Apoyo en su autoestima
* Darles ocasiones para que incrementen sus sentimientos de competencia social, propiciando encuentros con otros niños.
Los niños con un comportamiento agresivo tienen dificultades para ponerse en el punto de vista de los otros, victimizan a sus compañeros, son hostiles e impulsivos en sus reacciones.
Sus padres suelen tomar una de las dos opciones siguientes: o son permisivos e indulgentes (sobre todo con los pequeños) o con coercitivos y punitivos ( más frecuentemente a medida que crecen).
* Las estrategias basadas en la reflexión de lo ocurrido ayudan a estos niños a ponerse en el lugar de los demás, a pensar en las causas y consecuencias de sus acciones.